Pesto Crispy Chicken ¡20 cenas fáciles!

Este pollo al pesto gratinado es una cena fácil pero con sabor de restaurante: jugosas pechugas empanizadas en panko y hierbas, cubiertas con una mezcla cremosa de salsa Alfredo y pesto, y terminadas con mozzarella derretida. La combinación de texturas crujientes, cremosas y aromáticas convierte esta receta en una opción irresistible para compartir o consentirte entre semana. Perfecta para quienes buscan una comida reconfortante sin complicaciones.

Ingredientes

3 pechugas de pollo, fileteadas a la mitad (tipo mariposa)

1 cdta de sal

1 cda orégano molido

1 cda albahaca molida

2 huevos batidos

2 tazas de panko

1 cda orégano molido

1 cda albahaca molida

¼ taza aceite de oliva

3 tazas de salsa bechamel o alfredo, casera o de pote

3-5 cdas de pesto, casero o de pote

2 tazas de mozzarella rallada

Instrucciones

Precalentar horno de convección (o airfryer) a 425F. Sazonar pechugas con sal, oregano, albahaca y huevo. Mezclar bien y dejar reposar 3 minutos. En un recipiente aparte mezclar panko, orégano y albahaca. Cubrir las pechugas de pollo con la mezcla de panko. Colocar en una bandeja para hornear ligeramente engrasada. Y luego agregar el aceite de oliva restante en un hilo fino por encima de las pechugas. Meter pollo al horno por 15-25 minutos o hasta que temperatura interna del pollo alcance 165F. Mientras se hornea mezclar salsa alfredo con pesto. Cuando el pollo esté listo agregar unas cucharadas de la salsa cremosa sobre cada pechuga. Cubrir con el queso mozzarella y llevar al horno a gratinar. Cuando el queso esté derretido, dejamos reposar 3 minutos y servimos caliente.