Croquetas de Bacalao ¡10 recetas sin carne!

Inspiradas en la tradición mediterránea, estas croquetas son una joya del aprovechamiento y sabor. La bechamel con leche entera y mantequilla aporta una textura suave que contrasta con el empanizado dorado. El bacalao, pescado muy valorado desde la Edad Media por su conservación en sal, se convierte aquí en protagonista de un bocado elegante y reconfortante.

Ingredientes

2 paquetes de filete de bacalao (aprox. 1 lb)

½ taza (1 barra) de mantequilla

½ taza de harina de trigo (todo uso)

3 tazas de leche entera Gold

2 tazas de pan molido

3 huevos batidos

Instrucciones

Lavar bien el bacalao quitando la sal que tiene pegada. En una olla pequeña agregar agua hasta cubrir el pescado. Dejar hervir a fuego alto por 10 minutos. Cambiar el agua. Repetir el proceso 3 o 4 veces hasta que el bacalao ya no se sienta salado. Escurrir bien y desbaratar, yo usé un procesador. Pueden utilizar tenedores, tijeras o cuchillo para desmenuzarlo. En un sartén derretimos la mantequilla, agregamos la harina poco a poco hasta que se convierta en una pasta espesa. Luego agregamos leche poco a poco y vamos incorporando, cuando se convierta en una crema bien espesa, apagamos el fuego. Agregamos el bacalao desmenuzado y dejamos enfriar mientras mezclamos con movimientos envolventes. Cuando la masa esté fresca la dividimos por cucharadas en 18 bolitas, puede variar según el tamaño. Pasamos cada bola por huevo batido, por pan molido y luego repetimos, para que tenga doble empanizado. Nos aseguramos de que esté cubierta por todas partes. Llevamos las bolitas formadas al congelador por 30 minutos a 1 hora (mínimo). Calentar aceite y freír las bolas por unos minutos hasta que el pan molido se vea dorado. Si las croquetas están muy congeladas, asegurarse de no tener el aceite muy caliente para que el interior cremoso pueda calentarse sin que el exterior de pan se queme.